Un héroe Moderno...
“Ser modernos es encontrarnos en un ambiente que nos promete aventura, poder, goce, crecimiento, transformación de nosotros mismos y del mundo, y que al mismo tiempo amenaza con destruir todo lo que tenemos, todo lo que sabemos, todo lo que somos” (Marshall Berman, Todo lo sólido se desvanece en el aire: la experiencia de la modernidad, 1982).
Con esta cita comienza el film de Grant Gee titulado Joy Division, homónimo de una banda de Manchester, quienes tuvieron una carrera corta y dejaron un gran legado. En la guitarra Bernard Sumner, en el bajo Peter Hook, en la batería Stephen Morris y en la voz Ian Curtis. Empezaron tocando Punk, pero muy pronto desarrollaron su propio estilo y las letras, escritas por el vocalista, reflejan su experiencia moderna en la década de los 70: Manchester.
Ian Curtis no vivió la Revolución Industrial ni toda la gloria de la antigua Cottonpolis, le tocaron los estragos y duras condiciones de vida creadas por la mentalidad de una sociedad mecánica que depositó su fe en el progreso y en la tecnología. El tipo tuvo la capacidad de contemplar el entorno físico y anímico de su ciudad, asumió los daños ideológicos irreversibles.
La canción New Dawn Fades que comienza: “A change of speed, a change of style, a change of scene with no regrets”, describe el aspecto material de su localidad, tan efímero, tan cambiante e inestable, pues la ciudad atravesó una etapa de reconstrucción, estuvo en obra negra. Aunque, la economía para 1979, tomó otro rumbo con el triunfo de Thatcher cuyo programa de monetarismo, que llevó a la ruina a bancos y empresas, garantizó la estabilidad de la libra esterlina. Mientras tanto, se desvanece en el aire la sensibilidad de la sociedad, con estilos de vida fugaces porque deben ser acordes con los patrones de producción y consumo, a ese desvanecimiento se refiere esta canción.
El vocalista hizo a un lado ese típico rasgo cultural flemático, para expresar las emociones y reflexiones reprimidas, de una generación Moderna en transición a la Post-modernidad. Tuvo las agallas de reconocer que él no estaba bien, como diría Tony Wilson, invirtió el fuck you del Punk por un honesto y roído I am fucked. Él recogió los despojos materiales y morales que quedaron de su ciudad, recorriendo toda la gama de sus impresiones y guiándonos cómo se debe vivir la Modernidad en Manchester; cambió la estética de recepción que se tenía de una abatida ciudad, buscando en ella un espacio confortable y agradable, encontró una explicación a los cambios del entorno y las rupturas del pasado.
También escribió una rola referente a una amiga que padecía epilepsia; cuando ella murió él pensó She’s Lost Control, es una enfermedad que él padecía y que se había manifestado en algunas presentaciones en vivo. El médico le había indicado estar tranquilo, sin desvelos ni presiones, entonces debía abandonar al grupo.
El 18 de mayo de 1980, Ian Curtis se colgó en la cocina de su casa en Macclesfield, Manchester. El cuerpo lo encontró su esposa Deborah y fue enterrado en el cementerio local, la inscripción de su lápida lleva: “IAN CURTIS 18-5-1980 LOVE WILL TEAR US APART”. Dicha rola alcanzó el puesto número 13 en el chart británico y el video, fue el último que grabó. Los miembros que quedaron, Bernard Sumner, Stephen Morris y Peter Hook, formaron inmediatamente el grupo New Order, quienes por años no tocaron algo de Joy Division, pero entre los fanáticos, sus canciones jamás han dejado de escucharse.
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