Sexo Tántrico: Expansión de Placer...
La vida apresurada del mundo actual contribuye a que se enfríen las relaciones de pareja e incluso se ocasionen rupturas y por ende, infelicidad, sin embargo, existen diferentes prácticas orientales milenarias, como el sexo tántrico, que ayudan a que las relaciones se optimicen mediante una prolongación del placer. El sexo tántrico es tan solo una pieza del rompecabezas que componen al Tantra para llegar a alcanzar el Nirvana.
Esta práctica se originó en Oriente alrededor de los siglos V y VI A.C., sobre todo, en la antigua India, Pakistán y el Tíbet.La palabra Tantra proviene de las raíces sanscritas tan y tantori, que significan tejer o construir y extender o expandir, respectivamente. Así, el Tantra denota tejer y expandir la consciencia.
El objetivo principal de esta práctica es la conservación de la energía que genera la pareja durante el coito, es por ello que la eyaculación es un desperdicio de la misma. Por tanto, el sexo tántrico busca el autocontrol de los amantes, sobre todo del hombre, para expandir el placer.
Los que practican el sexo tántrico recomiendan la abstención, pues aseguran que de este modo, la energía que se guarda es mayor y por ende el placer se maximiza…
Las etapas y elementos del sexo tántrico son:• La ambientación del lugar en donde se llevará a cabo el encuentro con la pareja: velas, música, aceites, almohadas, telas… todo aquello que amenice el momento y haga que los amantes se sientan cómodos y relajados.
• Las caricias. Estas son importantes, pero lo curioso es que puedes acariciar todo el cuerpo de tu pareja a excepción de los genitales; lo que se busca es encontrar gozo en el simple hecho de acariciar.
• Los besos. La pareja se besa, pero esta vez sin tocarse; lentamente los ósculos se dirigen hacia lo que en un principio se prohibió: los genitales.
• Posteriormente, viene la penetración, la postura más común es Kali, llamada así por la Diosa Kali que en el Tantra despierta el erotismo en los dioses más poderosos, y donde la mujer se coloca encima de su pareja para regular el ritmo del coito.
• El orgasmo. Es el clímax del acto en sí, pero no por ello conlleva a la eyaculación, incluso muchos hombres piensan que lo alcanzan por el simple hecho de eyacular, pero la realidad es que 90% de ellos desconoce qué es un orgasmo… porque se puede llegar a él sin desperdiciar la energía a través de la eyaculación: esa es la meta del sexo tántrico.
• La respiración. Es un elemento de suma importancia durante el acto sexual, pues una vez controlada se llega a un estado de relajación capaz de sentir con mayor intensidad.
Al llevar a cabo estas etapas, se vuelve un círculo vicioso en la búsqueda de prolongar las sensaciones placenteras.
El sexo tántrico no es algo que se aprenda de la noche a la mañana, ni tampoco es algo mecánico… es algo que surge con la paciencia, constancia, práctica y, sobre todo, con amor.
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