¡Todos unos cavernícolas!
Con la fiebre que se vive en estas fechas, y no me refiero a la navidad, sino al Mundial Sudáfrica 2010, el sorteo final, cómo se han conformados los 8 grupos (A-H), el inicio de la quinielas, etcétera; culpo a todos los aficionados al futbol que mi cerebro genere esta clase de ideas, permítanme explicarles.
He comenzado a escuchar algunos comentarios como: “ahora sí llegamos al mundial”, “ojalá pasemos… chale pero nos toca abrir el mundial contra el anfitrión”, “Sí se puede, vamos a ganar”, “Si nos hubiera tocado contra Francia… seguro perdíamos”... Sólo por mencionar algunos. ¿Por qué será que apoyan así cuando tienen posibilidades (aunque sean nulas); eso sí, cuando la realidad nos pega en la cara, las expresiones “vamos a ganar” se convierten en “siempre es lo mismo con estos *!?#$***”. ¿Así se acabó el amor?

Un pensamiento invade mi cerebro, en realidad sólo una palabra: malinchista. Tal vez sea una simple coincidencia o, de las cien millones de neuronas que poseía mi cerebro, la mitad han desaparecido. ¡Averigüémoslo!
El Diccionario de la Real Academia Española define la palabra malinchista como aquello que muestra apego a lo extranjero con menosprecio de lo propio. Se dice que el origen de esta palabra se desprende de La Malinche, mujer que acompañó a Hernán Cortés y que traicionó a su pueblo facilitando las alianzas y pactos de los españoles con otros pueblos en contra del Imperio Mexica.
El malinchismo se da en diferentes ámbitos, no sólo en el futbol. Por ejemplo, cuando le dan empleo a una mujer alta y blanca (rasgos que difieren muchísimo a los de una latinoamericana) en vez de a una mexicana; cuando se les da la oportunidad a conductores/actores/productores de televisión o radio extranjeros en vez de a los nacionales; y cuando los hombres y mujeres apreciamos mejor la belleza en una persona rubia, de 1.80 y de ojos azules.
¿Podríamos considerar a los hombres mexicanos como malinchistas por dejar de ser apasionados al futbol en cuanto la selección pierde, y por otro lado, por preferir a las mujeres rubias sobre las morenas o pelirrojas?
Estudios recientes afirman que los hombres las prefieren rubias, una vez más la naturaleza está de su lado, esto se da desde el tiempo en que todos éramos peludos y salvajes: desde la era de las cavernas.
Pamela Villagra Castillo en su artículo “De preferencias rubias”, publicado en Mitos y Leyendas Urbanas, aborda el tema y los resultados a los que llegaron las Universidades St. Andrews y Central Lancashire, en Reino Unido, concluyen que a finales de la edad de hielo, cuando los alimentos empezaron a escasear, los hombres debieron aventurarse en cacerías de alto riesgo.
El aumento de la tasa de mortalidad afectó la proporcionalidad de varones y féminas y generó “una fuerte presión en la selección sexual”, lo que motivó de modo genético y espontáneo la aparición de colores poco habituales en los cabellos que, según dice el estudio, llevaron a la “raza mejorada” a triunfar en la lucha por asegurar la procreación.
¿Será que la ciencia la hacen los hombres? Continuaré investigando el tema, si llegase a encontrar alguna investigación científica cuyos resultados arrojen algo positivo hacia el género femenino, les avisaré… ¡Lo prometo o dejo de llamarme Lucía Plascencia Martínez!El estudio señala que la última persona de pelo rubio y ojos azules estará naciendo por ahí del año 2202 en Finlandia.


