Tame Impala - Innerspeaker…
El humano siempre encuentra algo en qué cobijarse, por ejemplo, en el amor, el deseo, la imaginación, el sexo, la diversión, sus pulsaciones, sus sentimientos e inclusive, su sufrimiento, pero cada uno de éstos, hacen que una persona, sea lo que sea, libere ese potencial que llevan dentro.Bienvenidos, esto es Vinil y en esta primera entrega les escribo sobre Tame Impala, una agrupación australiana que ha ayudado a que bandas como The Black Keys, Wolfmother y MGMT sean tan notables con sus propuestas de sonido diferente y enigmático durante el año 2010, que a la posmodernidad “electro” de nuestro tiempo no es fácil digerir.
La banda, estructurada por Kevin Parker (guitarra y voz), Dominic Simper (bajo) y Jay Watson (batería), ofrece un sonido único y constante en una era dominada en América Latina por grupos como Zoé, Enjambre, Neon Trees y un largo etcétera que, desde mi muy particular punto de vista, no solamente son de baja calidad, sino que carecen de personalidad.
Con un disco en su trayectoria llamado “Innerspeaker” y con un sonido que a base de bajo y batería transportan a otro plano de la realidad, que muy bien hace falta en la irreal época de Blackberry, Facebook y Twitter, han logrado atravesar el año 2010 sin ningún problema…Situado entre los mejores discos del 2010 según la revista Rolling Stone y la Warp Magazine, es, sin duda, un álbum que no debe quedarse fuera del más puro seguidor del sonido clásico de una banda de rock como The Zombies, ZZ Top, The Doors y Led Zeppelin, por mencionar algunos.
Para recorrer grandes distancias, nunca está de más acompañarse con el sonido psicodélico de Tame Impala.
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