El 14 de febrero conocido mundialmente como: “El Día de los Enamorados” (con excepción de Colombia, donde se celebra en septiembre), es un ritual del consumo, con los clásicos detalles que se derriten en tu boca, o bien se marchitan en pocos días. Más que eso, San Valentín es el pretexto perfecto para el paseo más cursi y romántico que puedas imaginar.

Alguna vez se han preguntado, ¿Cómo celebran en Paris, la ciudad del amor eterno, del romanticismo irresistible y considerado el lugar más novelesco en el planeta?
La ciudad de la luz, la conocemos a través de sus historias de amor, de los maravillosos cafés al pie de la torre Eiffel, de la avenida que tiene la fama de ser la más bella del mundo: Les Champs Èlysées,… pero pocos conocemos el tour que se realiza durante todo el año, pero es justo en el mes febrero que tiene más concurrencia: Paris Romantique.

El tour romántico de Paris empieza en la mañana por la plaza Abbesses donde podrás encontrar cualquier tipo de cafecitos, fuentes y demás monerías; para continuar con el clásico desayuno francés de croissant y café (no tan vasto como los desayunos buffet de México, pero al menos entretiene a tu estomago por un rato), cerca de la basílica de Sacré-Cœur.
Después de tu simbólico desayuno, te llevarán a recorrer las boutiques del barrio de Saint-Georges, donde se encuentra (quizá el único en su existencia) el museo de la Vie Romantique, que presenta entre cuadros y esculturas, la época del romanticismo francés.
El museo cuenta también con una serie de actividades que fuera de lo dulce de la cursilería, te llevarán a admirar el arte romántico; éstas consisten básicamente en lecturas de poemas, obras teatrales, proyecciones y presentaciones de artistas y cantantes.

Después de este recorrido por el barrio latino, pasearás por las espirales del jardín Luxemburgo, las cuales rodean las aguas de la famosa fuente dedicada a la reina María de Médicis, la cual lleva el mismo nombre. Al final de este tour de un día, la cena según tu elección, será bajo la luz de las velas en uno de los más exclusivos restaurantes de Paris cerca del río Sena.
Los grandes chefs de la cocina francesa tienen un restaurante aquí en Paris, donde recrean los patillos tradicionales de esta deliciosa gastronomía, con fusiones e innovaciones. Originalidad es lo que te espera en estas mesas famosas, además de un cuenta con las algunos ceros que cuando recuerdas que son euros … Ouch!, pero el amor lo vale ó ¿No?.